1- Podés dejar el vegetarianismo ideológico sin culpa.
2- Podés amigarte con el mundial y su entorno.
3- Podés comprar libros nuevos en Cúspide y dejar de hacerte el jipi revolviendo en las librerías de usados.
4- Deja de darte culpa vivir sin trabajar.
5- Increíblemente, y por primera vez en tu vida, sos gobierno.
6- Ergo, podés ser crítico sin ser marciano.
7- Dejar de quejarte de todo y de estar en contra de todo te da aire para militar cosas más copadas.
8- Tu humor mejora notablmente.
9- Entendés TANTAS cosas.
10-Ya no te sentís absolutamente caradura al expresar tus posiciones políticas desde tu lugar de clase media.
6 comentarios:
claramente
banco una y cada una de esas ventajas
Había hecho una respuesta re-cool pero no entraba. Así que te lo resumo en una palabra:
careta
ya me decían eso cuando era anarca, así que no me preocupa, la verdad
¿Y que nos queda a los que seguimos de la otra vereda? De los imperialistas y antipopulares.
y, seguir comprando libros feos y enojarse con el mundial. que se le va´cer
que la sigan... etc :p
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