martes, 7 de octubre de 2008

oh corazón mío...

... no te levantes
para testimoniar en contra de mi.





cada lágrima
en cada café de buenos aires
yo no tengo reparos
en tragar tierra
agua salada
tomar cada café cargado
si las manos sobre la mesa
es solo
que cada palabra escupida por una boca
que está en mi cara
ubicada estratégicamente bajo la nariz
unos centímetros, y en el centro mismo
pero que no es mi boca
-no puede serlo-
dice al aire que no es lo que es
y viceversa
y me descubro castigando
los silencios con mentiras
matorrales llenos de espinas
y yo no tengo problema en sentarme
con un cuaderno en una mesa
en cada café de buenos aires
solo que da miedo
que el café sea en realidad vino agrio
que las palabras escritas se rebelen
y cual soldados disidentes me ataquen
llenen mi cuerpo de agujeros vengativos
por haberlas usado para decir lo que no
es
es que yo
no tengo problema en caminar y recorrer
cada café de buenos aires
pero no quiero que sea sin vos
y sin embargo
lo contrario dicen las palabras
(esas perras negras)
lo contrario porque
se niega a salir de mi boca la palabra verdadera
aunque me jacte de praxis
aunque cada café bebido
aunque las manos sobre la mesa
las cartas sobre el mantel
en todos los cafecitos de buenos aires
en todos los rincones
en todas las esquinas escondidas
es que yo no tengo problemas con
las palabras
yo no tengo problema con las arañitas de tinta
pero duele tanto el silencio cuando
las palabras son así
falsas
en cada café de buenos aires
en cada vuelta de la esquina
donde las flores
son de acrílico
de papel de servilleta
y yo
que no tengo problema
con cada café, cada letra
cada palabra pronunciada
me veo frente al espejo
y tengo una vela verde en la mano
y en la otra un cuchillo de plástico
para hacer de mi muerte
algo también falso
para no perder la costumbre

3 comentarios:

Néstor Sbariggi dijo...

Me gustó Vero.

Beso

Anónimo dijo...

:(
muy lindo vero, yo a veces tambien me miento
a ver cuando te veo que te debo tu regalo de los 21

juli

Anónimo dijo...

:)